¿Cuántas veces en tu vida has repetido esta frase? Quizá al querer empezar una nueva dieta, o empezar a hacer algo de ejercicio o para introducir en tu vida algún tipo de hábito que te gustaría tener.
Medimos el tiempo por días, semanas, meses y años y esto tiene realmente una utilidad, no vamos a discutirlo, pero cuando se habla de modificar hábitos no suele ser muy útil eso de “el lunes empiezo”.
Básicamente porque es una trampa de tu mente y, en cierto modo, una forma de automachacarte, pues si el lunes no empiezas (como suele pasar) te sentirás culpable y fracasado.
Introduciendo un hábito en nuestra vida
Los hábitos se suelen sustituir unos por otros y eso además tiene que hacerse de forma lenta, progresiva y flexible. Tampoco suele ser buena idea hacer muchos cambios a la vez ya que será muy difícil de mantenerlos al ser esto muy abrumador.
En la modificación de hábitos la velocidad es clave. Tenemos que ser pacientes en el proceso y entender que es normal que los cambios cuesten. Estamos llenos de automatismos por lo que, si queremos hacer algún cambio, tendremos que poner presencia en ello, estar atentos para hacer realmente algo diferente. Siempre les digo a mis pacientes que, si cuesta, es que lo están haciendo bien.
Si no costase nada probablemente será que estamos haciendo lo mismo que antes sin darnos cuenta.
Además, cualquier momento puede ser bueno para iniciar un cambio, no hace falta que sea lunes, ni septiembre o enero. Es cierto, que estas fechas nos suelen invitar a reflexionar, conectar con cosas que nos gustaría cambiar y eso está bien, pero, si hoy tienes ganas de cambio, ¿por qué no intentarlo ya?
Ya sea con la alimentación o con el ejercicio o con atreverte a poner algún límite a otras personas o lo que sea. ¡Puedes empezar hoy!
Si quieres comer diferente, empieza por introducir una pieza de fruta hoy, si quieres hacer algo de ejercicio sal a caminar un rato, si quieres poner límites empieza a hacerlo en algo más pequeño y con alguien con quien no te cueste tanto y ya irás subiendo escalones.
No subestimes esos cambios por pequeños que parezcan, ya que, cada uno de ellos, te acercan al objetivo que quieres conseguir. No podemos llegar a la meta de una carrera de una sola zancada, ¿verdad? Pues esto es lo mismo.
Recuerda, como siempre te digo, ser flexible siempre. Si has incorporado el ejercicio como una rutina en tu vida y una semana no lo haces porque tienes visita familiar o te encuentras mal o, simplemente, no te apetece, no pasa nada. Retoma es hábito cuando puedas y listo.
Y, si necesitas ayuda en tus cambios, estaré encantada de acompañarte.
Soy Marisa Maza y tengo la suerte de poder ejercer, como profesión, mi gran pasión: la psicología.
Actualmente, llevo ya unos años con mi propia aventura emprendedora y dirijo mi propio centro de psicología en Bilbao atendiendo, tanto de forma presencial como online.
Mi compromiso es ayudarte a recuperar tu salud mental. Será un placer para mí acompañarte si así lo decides.